ADIC  RECLAMA JUSTICIA HISTÓRICA CON LOS  CÁNTABROS DE 1808 A 1814: Se Pide que  los actos del bicentenario de la guerra del francés tengan un claro acento cántabro.

La Asociación para la Defensa de los Intereses de Cantabria (ADIC)  considera que con motivo del bicentenario de la ocupación francesa, el Gobierno Cántabro, lejos de limitar los actos de que conmemoran esa efeméride a ensalzar a Pedro Velarde, no debe olvidar la historia de miles de combatientes cántabros que organizados por su cuenta y riesgo defendieron Cantabria en la denominada guerra del francés. En este sentido,  la asociación lamenta que en la reunión mantenida entre el Consejero de Presidencia, Vicente Mediavilla y el Delegado de Defensa en Cantabria, Miguel Merino, según lo que ha trascendido,  se confirme la ausencia de ese reconocimiento y se intuyan una serie de actos que pueden hacer caer al Gobierno en la tentación de patrocinar un patrioterismo español un tanto rancio lejos de honrar los héroes del “Armamento Cántabro”, que son dignos de ser recordados.

ADIC considera que Cantabria debe honrar a sus héroes y a su historia y que, con motivo de la próxima conmemoración de la llamada guerra del francés, estamos ante una oportunidad única para agradecer a miles de cántabros combatientes de esa guerra  sus sacrificios por defender el territorio cántabro del invasor francés. De esta manera, la asociación cree que la reunión mantenida entre el representante del Gobierno, sr Mediavilla, y el Delegado de Defensa,  sr. Merino, por lo que se ha difundido, trae consigo superponer una vez más a Pedro Velarde por encima de otros muchos combatientes por el mero hecho de ser cántabro y estar en Madrid el dos de mayo de 1808.

La Asociación recuerda que en Cantabria se fraguó, al margen del gobierno de la época, un cuerpo de voluntarios denominado Armamento Cántabro, luego llamado División Cántabra del que dependía una unidad de caballería –los Húsares de Cantabria- y otra de infantería –los Tiradores de Cantabria- que durante siete años hostigaron las tropas francesas no sólo en territorio cántabro sino en todo el norte peninsular y que unidos a guerrilleros no adscritos, lograron sonoras victorias en acciones militares y siempre bajo las premisas de la adscripción voluntaria y la aportación popular de fondos. Héroes destacados de esa época fueron Juan José González de la Riva, fundador del Armamento Cántabro, Juan Díaz de Porlier, brigadier de los Húsares o Juan López Campillo, guerrillero muy activo especialmente en el oriente cántabro.  

Para ADIC, los actos de conmemoración del bicentenario tienen, entre otras cosas,  que honrar la memoria de esos héroes y del propio pueblo cántabro que de manera espontánea sufragó la guerrilla. En consecuencia, desde el Gobierno, se debe apostar por apoyar unos actos populares y significativos, como la erección de monumentos y el nombramiento de vías públicas, la rememoración de acciones militares, el patrocinio de esos héroes o la publicación y divulgación de este apartado de nuestra historia y no como lo que parece ser plantea el delegado militar, que va más en sintonía con la exaltación militar y el fomento de un patrioterismo que oculta la verdadera historia en favor de la evocación idealizada de España.